Esta
carta bien podría titularse: “Rato Jones, en busca del cojín perdido”.
Parece
ser que el ex director gerente del FMI, ex presidente de Caja Madrid, ex
presidente de Bankia, ex Ministro de Economía, ex posible sucesor de José María
Aznar en 2003 por delante de Mariano Rajoy, es también el ex dueño de dos
cojines, que estos últimos días han sido noticia por unos curiosos
acontecimientos. Se dice que Rato acudió personalmente a un taller de costura (¿en
persona…?) con dos cojines, para pedir precio por su arreglo, porque tenían
descosido el lateral. Le pareció caro el precio, 20 €, ya ves, pero quedó en
llevarlos. Alguien depositó los cojines de Rato en la puerta del
establecimiento “Entre costuras”, aún cerrado, y su dueña allí los encontró al
abrir la tienda, por lo que dedujo que el arreglo le corría prisa. Corría el
verano de 2014. Ya en el mes de diciembre, Patricia, que así se llama la
costurera, cansada de guardar los pesados y enormes cojines ya reparados de
Rato, y por falta de espacio, decidió deshacerse de ellos, siguiendo la norma
de su negocio. Seis días después, Rato fue a buscar sus cojines. Al saber de su
pérdida, montó en cólera, argumentando que eran cojines de gran valor, hechos
con alfombras turcas, que su recuperación era imprescindible, y amenazó con
mandar a sus abogados si no se los devolvía.
No alcanzo a entender tanto
interés del ex de múltiples altos cargos, pero intuyo que el misterio de sus
cojines va para rato.
La ironía es el auténtico arte de la escritura.
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