Este es mi espacio, mi pequeña parcela de libertad, mi válvula de escape, mi cofre de sentimientos, mi retiro, mi confesionario, el escondite de mis rebeliones, el escaparate de mi alma.

martes, 27 de enero de 2015

Ecos en la oscuridad




Bajo el manto de la noche hay un mundo paralelo de sombras y de silencios quebrados. La penumbra arropa sueños, placeres, pero también en ella encuentran cobijo las lágrimas, las frustraciones, los pesares.
Todo cobra una dimensión distinta, como una mancha de tinta en una camisa blanca, como una puñalada en un cuerpo inocente, como un grito de dolor en la quietud de una siesta estival.





Cae la noche. Bajo el manto,
escondido entre sus manos,
un revoltijo de sombras
y de silencios quebrados.

La penumbra arropa sueños,
placer  corre por sus calles,
cobija un secreto llanto,
penas, dolor y pesares.

La oscuridad magnifica
en su escenario los ecos,
de soliloquios o duetos,
de fados o soleares.







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