A ti, que preferiste volar, libre como un
pájaro, antes que sufrir la humillación de ser desposeída de lo que era tuyo.
A
ti, que taconearás en la conciencia de tus verdugos.
A ti, que nadarás en las
lágrimas de los que te querían.
A ti, que nunca más podrás besar a tu hijo.
A
ti, que por un día serás protagonista en las noticias.
A ti, que le dejas un
trágico sendero marcado a otros desahuciados.
A ti, que has sido víctima de una
justicia social deshumanizada.
A ti, que acabarás siendo un número en una
estadística.
A ti, que me has puesto un nudo en la garganta cuando he sabido de
tu desgracia.
A ti, que has hecho temblar los cimientos de la solidaridad
ciudadana.
A ti, que ya no estarás aquí para asistir al acto final de esta
macabra obra de teatro.
A ti, Amaia.
UNA MADRE..., ESPOSA..., HIJA..., HERMANA..., AMIGA..., VECINA...
ResponderEliminar¡¡¡UNA PERSONA NORMAL!!!
Cegada por la impotencia,deshecha de dolor, de rabia,de pena...
Ahora, ya es tarde!!!
Políticos y banqueros parece que comienzan a "pensarse lo que están provocando"
¿¿¿CUÁNTAS VECES MÁS TENDREMOS QUE SOPORTAR NOTICIAS CON DESGRACIAS PERSONALES Y FAMILIARES???
¡¡¡PAÍS!!!
Besos desde EL TERRAO.