La incierta agonía del punto suspensivo
(“ESTAMPAS” – X)
Caminé por las páginas de la vida
entre comillas y signos de
admiración,
enfatizando cada acento sobre
un EGO con mayúsculas,
hasta que, en un doble paréntesis,
los circunloquios me pusieron
los puntos sobre las íes.
Más tarde, las dubitaciones
sembraron
una alfombra de interrogantes
bajo las líneas perpendiculares
de mis conjeturas.
Entonces yo, que tanto
me había mecido entre sensatas
y relajadas comas, enmarañado
por frases subordinadas, no supe
poner punto final a mis
sentimientos,
y subrayé todas mis haches.
En aquel intervalo mudo
tú aprovechaste para dar media
vuelta,
mientras ibas recitando el
abecedario,
como una monótona letanía,
y salpicaste la distancia de
indescifrables puntos
suspensivos…
que bonitas estampas, estampas X mi favorita!
ResponderEliminarMe alegra que te gusten mis estampas, "Anónimo". A mí me gustaría saber quién eres, para dedicarte una sonrisa, y tal vez alguna estampa...
EliminarUn saludo.
Sinceramente, no sé como ha llegado este enlace hasta mí:
Eliminarhttp://maribelandia.blogspot.com.es/2015/06/por-tierra-mar-y-aire.html?m=1
Quizás tu me lo puedas aclarar.
Saludos, Egg
Bueno, Enrique, suelo compartir cada post de mi blog en las redes, es fácil que te haya llegado a través de uno de tus contactos que tengamos en común... No sé si nos conocemos personalmente, ahora estamos todos interconectados. Te invito a entrar en Colegilandia cada vez que te apetezca. Un saludo.
EliminarDonde dije Colegilandia, título del primer poemario que escribí, quise decir Maribelandia.¡Cómo tengo la cabeza...!
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