Hoy cumple 19 años mi niño, mi pequeño, mi obra maestra. Yo, pequeña de estatura, traje al mundo con mucho interés y unos cuantos empujones este nuevo miembro de la familia, que pesó 4,250 Kgr. y midió 54 cms. Sus dos hermanos eligieron su nombre: LU, como el saltamontes del libro en el que comenzaron a leer. Decidí bautizarlo como Luis, para que fuera un diminutivo consecuente, y a día de hoy todos le siguen llamando Lu.
Esa imagen fue tomada en la última semana de embarazo. Parece mentira que no me quedaran estrías con ese volumen...
"Te quiero, a pesar de las miserias y tristezas del ser humano, de sus flaquezas y su desnudez, y también a causa de ellas...Por los renunciamientos, la servidumbre, los sudores y las lágrimas que me has costado...¡te amo!"
Esta frase está sacada de un libro que leí en mi adolescencia, "Primavera mortal", de Lajos Zilahy, escritor húngaro, y siempre ha sido en mi vida lo más parecido a una oración. Mi marido me tacha de excéntrica en mis gustos, opina que elijo en función de lo original que sea el objeto en cuestión, ya sea un libro, una marca... Recuerda divertido una anécdota ocurrida cuando fumaba, años ha, y compraba lo más raro que tenían en el estanco. Un día solicité a la estanquera un paquete de Bunti, que era café, confundiéndolo con Boncalo, que era la marca de tabaco que yo quería. En fin, todos tenemos un pasado...
Hoy el homenaje es para mi Lulito. Ha crecido, muuuuchoooo, se me ha hecho un hombre. Tiene una novia preciosa (no tengo que jurarlo, las fotos no mienten), y ya parece que está encarrilado en sus estudios -¡por fin!- Hemos atravesado dificultades académicas a causa de su hiperactividad, pero, una vez asumidos los inconvenientes, se ha descubierto la persona creativa y valiosa que lleva dentro.
Estoy orgullosa de él, y convencida que viviré muchas alegrías a su lado.
Todavía tengo que controlar las riendas de su vida, pero confío en su habilidad para llevarlas sin mi presencia.
Bueno, ya he acabado con las existencias de baberos, voy a finalizar esta entrada del blog.
¡Felicidades, cariño! Te quiero mucho.
Mamá.
Esa imagen fue tomada en la última semana de embarazo. Parece mentira que no me quedaran estrías con ese volumen...
"Te quiero, a pesar de las miserias y tristezas del ser humano, de sus flaquezas y su desnudez, y también a causa de ellas...Por los renunciamientos, la servidumbre, los sudores y las lágrimas que me has costado...¡te amo!"
Esta frase está sacada de un libro que leí en mi adolescencia, "Primavera mortal", de Lajos Zilahy, escritor húngaro, y siempre ha sido en mi vida lo más parecido a una oración. Mi marido me tacha de excéntrica en mis gustos, opina que elijo en función de lo original que sea el objeto en cuestión, ya sea un libro, una marca... Recuerda divertido una anécdota ocurrida cuando fumaba, años ha, y compraba lo más raro que tenían en el estanco. Un día solicité a la estanquera un paquete de Bunti, que era café, confundiéndolo con Boncalo, que era la marca de tabaco que yo quería. En fin, todos tenemos un pasado...
Hoy el homenaje es para mi Lulito. Ha crecido, muuuuchoooo, se me ha hecho un hombre. Tiene una novia preciosa (no tengo que jurarlo, las fotos no mienten), y ya parece que está encarrilado en sus estudios -¡por fin!- Hemos atravesado dificultades académicas a causa de su hiperactividad, pero, una vez asumidos los inconvenientes, se ha descubierto la persona creativa y valiosa que lleva dentro.
Estoy orgullosa de él, y convencida que viviré muchas alegrías a su lado.
Todavía tengo que controlar las riendas de su vida, pero confío en su habilidad para llevarlas sin mi presencia.
Bueno, ya he acabado con las existencias de baberos, voy a finalizar esta entrada del blog.
¡Felicidades, cariño! Te quiero mucho.
Mamá.
Maribel, jodia me has echo llorar, me ha encantadoooooooooo. Un besazooooooooo!!!!
ResponderEliminarGracias, guapa. Un besazo para ti y para tu hombrecito.
ResponderEliminarMaribel.
Muchas gracias Maribel. Me alegro muchisimo de haber conocido a este gran saltamontes, porque es una de las mejores personas que he conocido, con un corazon inmenso. Yo tambien me sentiría orgullosísima. Espero ayudar en este proceso de "encarrilamiento", eso intento! un beso enorme!
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola Maribel, soy María José, la hermana de Julia. Tu hijo es la dulzura en persona, guapo por fuera, pero sobretodo por dentro. Y me alegro de que cuide tan bien de mi pequeño tesoro :) Me gusta mucho tu Blog, lo apunto en favoritos. Abrazos!
ResponderEliminarGracias, María José. Nos conocimos de una manera apresurada y en unas circunstancias que no nos permitieron casi ni mirarnos. Seguro que habrá nuevas ocasiones para entablar una conversación tranquila, sobre "saltamontes", "yunas" o lo que vaya surgiendo.Son una pareja guapa,¿verdad? Un beso.
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