ABRIGO
He despertado envuelta por
un abrigo de abrazos que
tus manos han tejido con
mimo sobre mi piel
a la luz de las tinieblas.
Luce en mi vientre un tatuaje,
filigranas de caricias
pespunteadas por tus dedos
en el silencio de la madrugada.
El cálido recuerdo de tu aliento
sobre mi nuca permanece vivo,
enredado entre mi pelo,
acunado por el alba.
Tengo sed de tus besos y
busco el rastro que me lleve
a la fuente insaciable de tu boca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario