Ildefonso Matamoros Cuecas, alias “el Perigallo”, es un famoso personaje
de Oliva de la Frontera, que escribe cartas que el diario HOY le publica. Su
estilo es característico, y desde siempre me llamó la atención: sus palabras en
desuso, la alusión a juegos de antaño, sus menciones sobre oficios antiguos…
Todo me hacía pensar que se trataba de un hombre anciano.
Un
buen día se me ocurrió sugerir a D. José Joaquín Rodríguez Lara la posibilidad
de convocar una reunión para propiciar que nos conociésemos algunos de los
colaboradores habituales de “Cartas al Director”. Y, cuál no sería mi sorpresa,
respaldó mi idea con entusiasmo, ofreciéndose como intermediario para ponernos
en contacto. Me preguntó a quién quería conocer, y el primero de la lista fue
“el Perigallo”.
Y
llegó el gran día. El lugar de encuentro fue la cafetería del Hotel Río. Cuando
llegaron Ildefonso y María, su mujer, ya estaban allí Joaquín y Diego Algaba
conmigo. También se unió al grupo Pilar García de Pruneda Trevijano. Ildefonso
en persona me rompió los esquemas. No era el anciano que yo había imaginado,
sino un hombre poco mayor que yo, un hombre sencillo y afable, humilde y
agradecido, simpático y entrañable. Fue una reunión enriquecedora. Comentó su
ilusión de reunir todas sus cartas para publicarlas en un libro, y su proyecto
ya ha visto la luz: “Alejines”. Mi enhorabuena por ello, he de decirte que lo
compré a los pocos días de hablar contigo por teléfono.
Eres
para mí un ejemplo de voluntad, tesón y perseverancia, y te admiro y te aprecio
sinceramente desde aquel día. En este escrito que te dedico utilizo términos
que tú bien conoces, pero he de confesar que muchos de ellos también los
conocía yo, porque se han estilado igualmente en Santa Marta de los Barros, que
es el pueblo donde yo nací.
Es
solo un guiño de complicidad, sin más aspiraciones. Espero que te agrade.
Un
saludo,
Maribel.
Dedicado al “Perigallo”
Me ha dado el arrepío por mentar una mijinina
a un revoltillo amigo mío, que ni se lo barrunta. No me había vagado hasta hoy,
que siempre voy a zampatarama, recadando los andacapadres que mis morrales
dejan desparramados en el doblao, que se merecen una buena pelfa. Un día de
éstos voy a jondear toda la carrefilera de cacharros changaos que no valen ya
ni una froncia, y si acaso escamondo alguno para ponerlo en el topetón. Cucha,
que voy a echar un buche del piche, antes de seguir jociqueando por aquí, que
como soy una lambuza me he jamao una perrunilla y estoy atorá. No quiero ser
pejiguera, pero mejor el agua que el pirriaque, que te deja en tenguerengue y
te suelta la lengua como una repílfora haciendo escorrozos. Pero para
escorrozos los de los niños cuando estrumpen de llanto, emberrenchinaos, porque
jugando se han hecho una chinfarrá en la rodilla, y llegan desatacados, con una
embozá de bolindres en la faldiquera, con mocos y arrecíos de frío. Las jaquetonas
como yo los recogemos en casa y fechamos
la puerta, y cuando ya están en la piltra estos farraguas jurguiñas, les leo unos alejines de un Perigallo de
Oliva, que ya están empicados. Y ábate
me quedo frita yo, qué poca lacha…
Enero de 2.013.
¡¡¡ME ENCANTA!!!
ResponderEliminarEl Perigallo puede estar orgulloso de la seguidora que tiene. Le has hecho una dedicatoria preciosa!!!
Ahora,... me imagino que "la cosa" no habrá sido fácil!!!... enlazar todas las palabrejas en un texto con sentido... uff!!!
Muchas de esas palabrejas me son muy familiares y además las utilizo en conversaciones, algun@s me miran con cara rara, jeje...¡¡¡tengo que dar explicaciones!!!
Mijina, revoltillo, barruntar, vagado, jondear, el doblao,changaos...,¡¡¡cucha!!!, atorá, jalao...
En fin, no veo el momento de dejar de escribir todas estas palabras que me chiflan.
¿¿¿Dónde las aprendí??? No tengo ni idea!!! No las dice mi madre ni nadie de mi familia.
...Será de tantos años ir de pueblo en pueblo "dando escuela"...
Un abrazo desde EL TERRAO.
Esta es la gran riqueza del lenguaje, tenemos posibilidades para expresarnos según el sitio y la ocasión, y es bueno desempolvar de cuando en cuando términos que agonizan, aunque solo sea pura anécdota. Me alegro que te haya hecho pasar un buen rato. En cuanto al Perigallo, es todo un personaje y una institución en Oliva, su pueblo.
ResponderEliminarSaludos desde Maribelandia.