Este es mi espacio, mi pequeña parcela de libertad, mi válvula de escape, mi cofre de sentimientos, mi retiro, mi confesionario, el escondite de mis rebeliones, el escaparate de mi alma.

jueves, 5 de enero de 2012

Bloggermanía


     No se puede negar que los blogueros han aumentado considerablemente su población en los últimos años. Sus escritos son públicos, y todo el que conozca el enlace tiene acceso a ellos, amén de otros que lo encuentran por pura casualidad. 
     Entiendo que el bloguero tiene un compromiso adquirido con el idioma, por respeto a los que leen sus palabras. Tienen el deber de mejorar en su labor, si no quieren caer en la desgracia de ser tachados como un hoygan
     Se acuñó hace años el apelativo hoygan” en la red para denominar a aquellos que irrumpían en foros con una ortografía lamentable y una descarada escasez de modales. Podían  leerse  frases como: Hoygan [en lugar de oigan], necesito alluda urjente con un problema en mi ordenador”.  
     Algunos blogs que he leído son una constante agresión al castellano, eso sin entrar a considerar su contenido. García Márquez, en una entrevista, afirmó: “lo 1º para escribir bien en internet es escribir bien”. Siempre ha existido gente que escribe mal, pero ahora se les ve más. La escuela tiene aspectos que subsanar en este sentido.
     Y algunos blogueros deberían pedir a los RRMM un manual de ortografía.


                                       Dulces sueños, followers...

3 comentarios:

  1. Buenas noches Maribel:
    Hoy en día el que no dispone de un blog es porque no quiere, verdaderamente, se puede decir sin tenmor a equivocarnos que la apertura y el mantenimiento de un medio tan poderoso de comunicación resulta tentador para cualquiera, conviene, sin embargo, cuidarlo como a la niña de tus ojos, para ello hay que esmerarse y escribirlo bien, y como tú dices cuidar la ortografía al máximo, así como también, las reglas de acentuación y, salpicar los escritos con una puntuación como Dios manda, ya que, el conjunto de todas esas condiciones y de alguna otra constituyen su verdadera carta de presentación. Felicidades por tu escrito. Un abrazo
    Primitivo

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  2. Me alegro que coincidas con mi opinión sobre el tema, y mi agradecimiento por tu felicitación. Me caes bien de antemano, sin conocerte, por compartir herencia genética con mi apreciado Diego. Un abrazo.

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  3. Este escrito fue publicado en la sección "Cartas al director", del periódico HOY, el jueves 5 de enero de 2012.

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