CONVIVENCIA

                                           CONVIVENCIA CON 3º de LA ESO

   Ha comenzado la última semana de clases antes de las vacaciones de Semana Santa. ¡Qué trimestre más largo! Se me ha hecho interminable, una verdadera prueba de resistencia. Suerte que estoy muy en forma, pero necesito un paréntesis para afrontar los retos de los dos últimos meses: los controles finales, las competiciones programadas dentro y fuera del centro, la coreografía para el concurso de Batidos Puleva, la Semana de Europa que está organizando la “Célula Europa” a cuyo comité pertenezco, las elecciones sindicales, las notas –que es un trabajo minucioso que lleva un tiempo difícil de precisar-, la Memoria del curso, la función final…¡puf!, me estoy estresando solo de hacer la relación.

   Hoy he salido de mi rutina habitual para dirigir una convivencia con alumnos de 3º de la ESO, que fueron alumnos míos hasta 6º de Primaria. Me lo propusieron los miembros del equipo de Pastoral, y después de la experiencia del año pasado, acepté gustosa. No puedo evitar sentirme orgullosa de ellos cuando los veo tan altos y tan hombrecitos ellos, y tan monas y tan maduras ellas, casi como una madre. No hay que olvidar el hecho de que les he dado Educación Física durante 4 años consecutivos, de 3º a 6º de Primaria, por lo que les he enseñado, consolado, reñido, curado, aconsejado y limpiado los mocos en más de una ocasión.

   Las dinámicas giraban en torno a su “proyecto de vida”, ya que les ha llegado el momento de dirigir sus decisiones conforme a lo que cada uno quiera hacer en el futuro, no solo profesional, sino como individuos con un sello que tiene como lema:”Trabajo, Fe y Amor”, el fundamento de nuestro ideario. Dos horas en las que yo he propuesto actividades, pero en las que los verdaderos protagonistas han sido ellos, 31 adolescentes con toda la vida por delante, con la posibilidad única e irrepetible de escribir cada página de su historia.

   Ojalá les haya clarificado algo, o al menos, sea un punto de arranque para sus reflexiones. Yo me he sentido feliz de acercarme a ellos después de varios años desconectados. 

   ¡Os deseo toda la suerte del mundo en vuestras elecciones!