Por segundo año consecutivo se ha celebrado en Badajoz "La noche en blanco", y por lo que he podido apreciar personalmente el éxito ha sido rotundo. La gente ha salido de su madriguera por unas horas para invadir, literalmente, el casco antiguo. Las calles eran una fiesta, y lucían engalanadas de luz y color, para la ocasión. La foto está tomada en la Plaza de Minayo, teniendo como telón de fondo el teatro López de Ayala.
La oferta de actos culturales, eventos musicales, espectáculos callejeros, actividades para niños, visitas a museos, monumentos y exposiciones han atendido todos los gustos. El que se queje, lo hará por vicio, porque por algo hay que protestar, pero mi evaluación es altamente positiva. Por si fuera poco, la noche ha sido agradable meteorológicamente hablando. No quiero imaginar el desastre si hubiese coincidido con las tormentas, lluvia y viento de esta misma semana.
Así que ¡chapeau!. Por los organizadores y por los ciudadanos que han respaldado esta iniciativa.
El próximo año volveremos a disfrutarla, pero a día de hoy, ¡que nos quiten lo bailado!
OFF
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