Hortera

Lo dijo Mario Conde como una gracia cuando todavía era el rey del mambo: “el que no tiene una cuenta en Suiza es un hortera”. Llevo unos días desazonada con cada nuevo aporte de información sobre los papeles de Panamá. Hay tantos frentes de actualidad, que opinar sobre todos ellos me llevaría dedicación exclusiva, y no me lo puedo permitir, porque tengo que trabajar para llegar a fin de mes, y además soy una hortera. No tengo cuenta en Suiza, ni capital oculto en ningún paraíso fiscal. He pasado de la indignación y la rabia a la depresión directamente. El último que se suma a la interminable lista de listos es José Manuel Soria, el ministro en funciones de Industria, Energía y Turismo. Ha sido valiente y ha dado la cara rápidamente, para decir, resumiendo, “esto no es lo que parece”. Pero yo creo que lo que es, es. Por mucho farol que quieras echarte. No creo que Panamá, Suiza, Andorra o Las Bahamas quieran soltar prenda de ninguno de sus acaudalados clientes, porque se les acabaría el chollo. Así que, Soria, tranquilo, que tu secreto, si lo tienes, está a buen recaudo. Y yo seguiré siendo una hortera, por muy temprano que me levante.