Hoy se cumplen 2 años de la muerte de mamá y 28 años de la muerte de papá. Sí, los dos coincidieron hasta en la fecha para morir. Estuvieron juntos toda una vida y ahora descansan juntos en la muerte.
Papá, no importan los años transcurridos desde que nos dejaste, sigo teniéndote presente en infinidad de momentos. Sueño con tu imagen tocando la armónica, o silbando cualquier canción, mientras conducías sin prisas, haciendo de cada viaje un concierto improvisado.
La herida de tu ausencia, mamá, aún es sangrante. Todavía noto en el ambiente tu presencia, porque todo mi entorno está lleno de tu recuerdo. Celebro que no hayas tenido que padecer esta situación delirante que estamos atravesando, porque se me habría hecho aún más insoportable.
Hoy es el "Día de la madre", y habría ido a verte. Ya no es posible, se ha hecho tarde para largas conversaciones, para comidas rodeada de tus nietos, para romerías, para celebraciones de cumpleaños, para palabras no dichas, para consejos, para abrazos...
Ni siquiera podremos ir a llevaros unas flores frescas por culpa del confinamiento. Flotará en el aire un perfume melancólico y amargo.
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